La relajación es un estado en el que el cuerpo y la mente están en reposo. Cuando estamos relajados, aumentan nuestra atención, concentración y memoria. Además, es más fácil dar rienda suelta a la imaginación y la creatividad. Por eso, relajados aprendemos mejor.
Hoy con ayuda de la música de CLARO DE LUNA, os voy a dar unas pautas, consejos e ideas para poder relajarnos en casa:
Use una luz tenue y trate de crear un espacio lo más silencioso posible para llevar a cabo la actividad. Es necesario que os ayude un familiar para que os guíe y os lea lo que os añado a continuación.
A la hora de guiar los ejercicios de relajación, recuerde mantener un tono de voz suave y pausado. Puede usar el siguiente texto como guía:
• Control de la respiración: Tranquilamente, en silencio, tumbaos en el suelo.
Las piernas están ligeramente separadas y los pies caen hacia los lados. Los brazos también están un poco separados del cuerpo y las palmas de las manos miran hacia arriba.
Cerrad los ojos y comenzad a inspirar lentamente por la nariz. Muy lentamente... No subáis los hombros. Inspirad muy despacio.
Retened el aire... Un, dos, tres segundos. Y espirad por la boca, lo más despacio posible. Imaginad que sois un globo, que se hincha y se deshincha.
Volved a inspirar muy lentamente... Notad cómo se hinchan el abdomen y el pecho. Retened el aire de nuevo. Un, dos, tres.
Y espirad lentamente por la boca.
• Tensión y relajación de ojos, nariz, manos y hombros:
1. Cerrar y abrir los ojos.
Cerrad fuertemente los ojos. Los músculos de la cara también se contraen. Mantenedlos cerrados en tensión... y soltad. La cara está mucho más relajada así.
2. Espantar una mariposa con la nariz.
De pronto, notáis cómo una mariposa juguetona se os ha posado en la nariz. No podéis mover los brazos y os está haciendo cosquillas... Tratad de quitárosla moviendo solo la nariz.
Todos los músculos de la nariz y de la boca también se tensan. Por fin, la mariposa echa a volar. Se ha ido y vuestra cara está relajada. Os sentís bien con la cara relajada.
3. Exprimir un limón.
Imaginad que estáis exprimiendo un limón con las manos. Queréis sacarle todo el jugo. Apretáis muy fuerte. Notáis cómo los brazos se tensan... Mantened los puños apretados fuertemente y soltad. Notad las manos y los brazos muy relajados.
4. Imitar a una tortuga.
Imaginad ahora que sois una tortuga. Estáis en la orilla de un río. Podéis escuchar el fluir del agua... Todo parece tranquilo, pero de pronto veis cómo un cocodrilo se acerca. Asustados, decidís meteros en vuestro caparazón. Para ello, subís los hombros todo lo que podéis hasta hacer desaparecer vuestra cabeza, lenta y sigilosamente... Un, dos, tres. Después, escucháis al cocodrilo alejarse. Ha pasado el peligro. Poco a poco asomáis la cabeza. Ahora sí, los hombros y el cuello están relajados, muy relajados.
• Títeres y titiriteros:
Este ejercicio se realiza en parejas. Uno será el títere y el otro, el titiritero. Posteriormente, se intercambiarán los papeles.
En estado de relajación, los titiriteros vais a comenzar a jugar con vuestro títere. Lentamente, muy lentamente, tirad del hilo que sujeta la mano derecha del títere. Esta tiene que subir muy lentamente, muy despacio. Cuando ya esté arriba, soltad el hilo. La mano del títere tiene que caer con todo su peso. Continuad tirando del hilo de la mano izquierda, de la rodilla derecha, de la izquierda, de un pie y del otro.
• Masajes en la espalda:
3. Exprimir un limón.
Imaginad que estáis exprimiendo un limón con las manos. Queréis sacarle todo el jugo. Apretáis muy fuerte. Notáis cómo los brazos se tensan... Mantened los puños apretados fuertemente y soltad. Notad las manos y los brazos muy relajados.
4. Imitar a una tortuga.
Imaginad ahora que sois una tortuga. Estáis en la orilla de un río. Podéis escuchar el fluir del agua... Todo parece tranquilo, pero de pronto veis cómo un cocodrilo se acerca. Asustados, decidís meteros en vuestro caparazón. Para ello, subís los hombros todo lo que podéis hasta hacer desaparecer vuestra cabeza, lenta y sigilosamente... Un, dos, tres. Después, escucháis al cocodrilo alejarse. Ha pasado el peligro. Poco a poco asomáis la cabeza. Ahora sí, los hombros y el cuello están relajados, muy relajados.
• Títeres y titiriteros:
Este ejercicio se realiza en parejas. Uno será el títere y el otro, el titiritero. Posteriormente, se intercambiarán los papeles.
En estado de relajación, los titiriteros vais a comenzar a jugar con vuestro títere. Lentamente, muy lentamente, tirad del hilo que sujeta la mano derecha del títere. Esta tiene que subir muy lentamente, muy despacio. Cuando ya esté arriba, soltad el hilo. La mano del títere tiene que caer con todo su peso. Continuad tirando del hilo de la mano izquierda, de la rodilla derecha, de la izquierda, de un pie y del otro.
• Masajes en la espalda:
Este ejercicio se realiza en parejas, empleando cada una, una pelota de tenis. Uno de sus integrantes será el masajista y el otro, el paciente, que se tumbará boca abajo en el suelo. Posteriormente, se intercambiarán los papeles.
Vamos a tratar de que nuestro compañero o compañera se relaje lo máximo posible. Para ello, colocad la pelota de tenis encima de su espalda. Abrid la palma de la mano y colocadla sobre la pelota. Lentamente, muy lentamente, hacedla girar. Pasad la pelota por la espalda de vuestra pareja, por sus brazos y por sus piernas.
Y ahora para terminar, un ejercicio de audición en el que identificar los instrumentos y en qué orden suenan:
Vamos a tratar de que nuestro compañero o compañera se relaje lo máximo posible. Para ello, colocad la pelota de tenis encima de su espalda. Abrid la palma de la mano y colocadla sobre la pelota. Lentamente, muy lentamente, hacedla girar. Pasad la pelota por la espalda de vuestra pareja, por sus brazos y por sus piernas.
Y ahora para terminar, un ejercicio de audición en el que identificar los instrumentos y en qué orden suenan:
Un abrazo.
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